lunes, 27 de julio de 2009

Secretarias solidarias

Las secretarias tenemos muchos contactos, recursos, conocimientos y aptitudes que podemos usar con un fin adicional al de nuestro desarrollo profesional: ayudar a los que más lo necesitan. De esta forma, aportamos nuestro granito de arena para un mundo mejor y volcamos nuestra vocación de servicio a tareas solidarias que nos llenan de satisfacción y orgullo.

En la sección "Ayudanos a ayudar" de nuestra web comunicaremos todas las causas solidarias con las que colaboramos, para que todas las interesadas en participar puedan hacerlo. Toda ayuda, por mínima que sea, siempre será muy bienvenida por aquellos que tanto la necesitan.

Si te interesa formar parte de nuestro grupo de Secretarias Solidarias, por favor envianos un mail a solidaridad@mundodesecretarias.com.ar, para que podamos agregarte a la lista de correo a través de la cual intercambiaremos información, pedidos solidarios, opiniones e ideas vía correo electrónico.

¡Muchas gracias!

Objetivos engañosos en la búsqueda de empleo

El tiempo es dinero -independientemente de que se tenga un empleo o no. Aunque ir en busca de todas las posibilidades cuando se busca trabajo podría resultar tentador, no lo haga. Muchas pueden llevarlo a un callejón sin salida -donde podría perder el contenido de su billetera.

Una búsqueda con enfoque que utiliza métodos probados y comprobados, especialmente cultivar una red de contactos, será lo que le consiga su siguiente empleo, no tácticas que emanan desesperación.

En su búsqueda de trabajo, evite estos cinco errores que producirán los peores resultados, de acuerdo a la asesora de entornos laborales Liz Ryan.

1. Repartir y rezar

No envíe su curriculum a ciegas y sin que se lo hayan pedido, ya sea electrónicamente o de otro modo, a cualquier compañía sin hacer primero contacto verbal. Ryan, fundadora de AskLizRyan.com, dice, "repartir cartas de presentación genéricas y curriculums idénticos en grandes volúmenes, y luego cruzar los dedos, es totalmente improductivo al buscar trabajo. Eso no funciona y no ha funcionado en 10 años o más". Establezca una conexión antes de enviar una carta de presentación adaptada a la compañía, añade Ryan, "incluso puede adaptar su curriculum si así lo requiere una vacante".

2. Ir a hacer fila en feria de empleo.

Ryan admite que "es triste decirlo, pero la mayoría de las ferias de empleo son una pérdida de tiempo. Evite las ferias de empleo enormes y masivas, donde una inmensidad de compañías tienen puestos y, sin embargo, nadie recibe curriculums". Hay algunas ferias de empleo que tienen valor. Ryan, quien ha sido ejecutiva de recursos humanos, señala los horarios abiertos de compañías específicas y ferias de colocación para universitarios a punto de graduarse. Eche mano de su red de contactos para saber si alguien puede recomendar ferias que valgan la pena. "Averigüe antes de dirigirse a una feria de empleo, o de lo contrario se arriesga a perder su tiempo y a que su ego sea golpeado".

3. Obtener certificaciones que nadie quiere.

Es común sentirse poco seguro de sus habilidades si se le está dificultando conseguir trabajo, pero no se apresure a gastar dinero en algún entrenamiento adicional a menos de que esté seguro de que producirá resultados mejorados. Ryan revela, "antes de inscribirse a un programa para la certificación de un entrenamiento, verifique las vacantes para asegurarse de que las compañías lo están pidiendo. No tiene caso invertir tiempo y dinero en una certificación que nadie quiere".

Si una institución educativa insiste en venderle el curso, dice Ryan, "pregúntele a la gente en la escuela que realiza la certificación, ¿qué compañías locales han contratado a sus egresados en el último año?. Si no pueden decírselo, huya".

4. Pagarle a un cazatalentos

No le dé dinero a cualquier tipo de reclutador ni firme un contrato donde acceda a hacerlo. "Los verdaderos cazatalentos, también conocidos como consultores de búsqueda de empleo o reclutadores externos, no aceptarán su dinero. Las compañías les pagan para que llenen vacantes". Ryan advierte, "si un reclutador lo llama o envía un correo electrónico para decir que cuenta con vacantesy luego lo invita a su oficina para una sesión de orientación y le presenta una variedad de servicios de asesoría profesional, salga corriendo. Los verdaderos profesionistas de la búsqueda de trabajo no aceptarán ni un centavo de sus candidatos".

5. Inscribirse a un servicio que envía curriculums masivamente por usted.

Esta táctica anticuada -y desesperada- desalienta por completo a quienes podrían contratarlo y tiene cierto aire de correo chatarra. Ryan dice, "los servicios que envían cientos de currículums podrían haber valido la pena hace 20 años. Actualmente, son algo peor que inútiles, porque irritan a las compañías que reciben curriculums no solicitados. Olvídese de los servicios de envío masivo de curriculums y realice su propia investigación cuidadosa para ponerse en contacto con las personas a cargo de tomar decisiones, con mensajes que de hecho quieran escuchar".
Fuente: Caroline M. L. Potter
Yahoo! HotJobs

miércoles, 15 de julio de 2009

Se quiere, se puede


Estuve recordando mi primer trabajo como secretaria. Trabajaba en una empresa multinacional como recepcionista hacía dos años, pero siempre había querido ser secretaria. Entonces me planteé una meta. Sentía que ya había cumplido mi ciclo en la Recepción, había aprendido mucho sobre la empresa y me sentía realmente preparada para un nuevo desafío.

No solo me planteé el puesto que me gustaría ocupar, sino también con quién me gustaría trabajar. Cuando nos proponemos metas debemos saber detectar oportunidades, por eso miré a mi alrededor y noté que el director de la empresa era el único ejecutivo que no tenía secretaria. No tardé mucho en comprender que allí estaba mi oportunidad. Además me interesaba trabajar con él ya que tenía una imagen muy seria y profesional. Sabía que era una persona muy exigente, pero eso constituía un desafío que me atraía y me garantizaba que podría aprender mucho a su lado.

Preparé una propuesta, detallando todas las tareas que podía realizar en base a mis conocimientos y de qué manera podía ayudarlo a optimizar sus tiempos y resultados. Junté coraje y le solicité una entrevista. En esa charla, presenté mi propuesta, manifesté mi compromiso con la empresa, mis deseos de crecer y mi interés puntual en desempeñarme en ese puesto.

Al poco tiempo me convertía en secretaria de Dirección, una posición interesante porque aprendí mucho y porque, al tratarse de un puesto nuevo, pude diseñarlo a mi manera.

Hoy me pregunto qué hubiera ocurrido si no hubiera decidido entonces presentar mi propuesta. Tal vez seguiría aún en aquella Recepción, soñando con todas las cosas que podría hacer en un puesto nuevo.

La enseñanza que me dejó aquella experiencia es que si realmente nos proponemos algo, podemos lograrlo. Lo importante es dejar de soñar y decidirse a actuar.

En el trabajo, al igual que en la vida, son muchas las personas que nos rodean y podemos fácilmente pasar desapercibidos si no levantamos la mano y decimos "aquí estoy". Es una forma de "vendernos", de demostrar que tenemos capacidades, aspiraciones, compromiso y nos motiva enfrentar nuevos desafíos.

Y ustedes... ¿están de acuerdo con el "se quiere, se puede"? ¿Cuáles fueron sus metas cumplidas a nivel laboral, sus mejores logros? ¿Cuáles son sus metas actuales?

Compartiendo estas experiencias podremos ayudar a aquellas personas que no se animan a decir "aquí estoy" y que siguen soñando con todas las cosas que podrían hacer y no hacen porque creen que no se les presenta la oportunidad. También, revisando nuestros propios logros alimentamos nuestra seguridad y autoestima. Recordemos... "Las oportunidades no se nos dan casualmente, nosotros debemos buscarlas, provocarlas y saber aprovecharlas".